Videojuegos que te harán llorar
Algunos videojuegos no solo ofrecen acción o desafíos intensos, sino que también logran conectar a nivel emocional con los jugadores de una manera profunda. Ya sea por su historia conmovedora, personajes entrañables o giros inesperados en la trama, hay títulos que nos sacuden el alma y nos arrancan lágrimas.
Shadow of the Colossus (2005)
Tomando el concepto de enfrentamientos contra jefes y transformándolo en una verdadera obra de arte, *Shadow of the Colossus* recibe elogios en prácticamente todos los aspectos. Pero también es increíblemente deprimente. No solo estás matando a estas majestuosas criaturas que no le han hecho daño a nadie, sino que lo haces porque una voz dice que es necesario para traer de vuelta a la amada perdida de Wander.
Marvel’s Spider-Man (2018)
No sería un juego de Peter Parker si no hubiera tanto desamor y melancolía como heroísmo. El mejor ejemplo de esto se da tras la derrota de Doc Ock, cuando Peter se enfrenta a la cruel elección de proporcionar una cura para los ciudadanos de Nueva York o salvar la vida de la tía May. Con algunas últimas palabras de aliento y mucha fuerza de voluntad, Peter decide hacer lo correcto, incluso a costa de la persona que más ama. Es tremendamente desgarrador, pero es un reflejo perfecto del carácter de Spider-Man. ¡Prepárate para llorar!
Red Dead Redemption 2 (2018)
Arthur Morgan puede que no haya sido un santo, pero su último recorrido en los días moribundos del viejo oeste fue épico, lleno de momentos amargos difíciles de digerir. Entre los tiroteos y los caballos, fuimos testigos de un hombre enfrentándose a su inminente muerte, obligado a confrontar sus errores y la fractura de la banda Van Der Linde. No creemos que haya un momento en la memoria reciente de los videojuegos que haya golpeado tan fuerte como ver a Arthur dar su último aliento mientras observa el amanecer.
That Dragon, Cancer (2016)
No podemos imaginar una situación peor que descubrir que tu hijo ha sido diagnosticado con cáncer, pero eso es exactamente lo que les sucedió a Ryan y Amy Green, quienes decidieron documentar de manera semi-ficticia la vida de su hijo Joel antes de su inevitable fallecimiento. Como puedes imaginar, este no es un juego para “disfrutar”, sino más bien para experimentar, entrelazando los altibajos de la vida de la familia Green, junto con imágenes evocadoras que exploran temas de duelo y fe. Es un proyecto profundamente personal que es tan humilde como devastador, y solo podemos esperar que el resultado final haya traído algo de paz.
Life is Strange (2015)
Uno de los muchos juegos de aventuras episódicos que surgieron en su momento, *Life is Strange* sigue las aventuras de una estudiante universitaria que un día descubre que puede manipular el tiempo. Aunque la premisa suena emocionante, la historia explora temas incómodos como las dinámicas familiares rotas, la muerte y las relaciones tóxicas, todo entrelazado con un misterio de asesinato y líneas de tiempo alternativas. La relación entre Max y Chloe es el corazón de esta historia, y como el juego depende de las decisiones del jugador, las cosas no siempre terminan bien.
The Last of US (2013)
Hay apocalipsis de zombis, y luego está *The Last of Us*. El juego de Naughty Dog es deprimente de principio a fin, centrándose en las luchas de Joel y Ellie mientras atraviesan una América devastada con la esperanza de encontrar una cura para el virus que ha asolado al mundo. Desafortunadamente para ellos, no hay cura para la maldad que reside en el corazón humano. Entre la muerte de la hija de Joel, lo que sucede con Henry y Sam, el enfrentamiento con David y sus caníbales, y la decisión final de Joel para proteger a Ellie, *The Last of Us* ofrece un vistazo a los horrores a los que todos somos capaces de recurrir por proteger lo que amamos.
The Walking Dead (2012)
Posiblemente lo mejor que ha salido de la licencia de *The Walking Dead*, la fórmula episódica e interactiva de Telltale Games ofreció un enfoque novedoso al horror y al desamor en un mundo infestado de caminantes. El vínculo entre Lee y Clementine, como si fueran padre e hija, te mantendrá profundamente invertido, casi desesperado por mantenerlos a salvo, con cada acción conduciendo a un resultado sangriento tras otro. Las cosas pueden haber decaído en las últimas temporadas, pero la primera sigue siendo una maravilla, que nos rompió el corazón con ese final desgarrador.
To the Moon (2011)
Un pequeño indie que pasó desapercibido en su momento, *To the Moon* es un juego bellamente inquietante que se queda contigo mucho tiempo después de haberlo completado. Siguiendo a dos científicos al estilo de *Eternal Sunshine*, quienes implantan recuerdos falsos en un hombre moribundo para que viva el sueño que siempre deseó compartir con su esposa emocionalmente distante, las cosas se complican al ahondar en su pasado. Incluso con los elementos de ciencia ficción, *To the Moon* es una historia increíblemente humana sobre la búsqueda de la felicidad y cómo la vida rara vez es lo suficientemente amable como para hacer que el viaje sea fácil.
Before Your Eyes (2021)
Todos conocemos la frase que dice que la vida pasa en un instante antes de morir, y esto es la base de este juego narrativo en primera persona, donde los jugadores literalmente reviven la vida del fallecido desde su punto de vista. Aparte de las bellas imágenes y su enfoque imaginativo del más allá, su mayor atractivo es el uso del seguimiento ocular. Al parpadear, el juego cambia instantáneamente a una nueva escena. Esto evoca la amarga inevitabilidad de tener que dejar ir, por mucho que desees aferrarte a los tiempos más felices. Puede ser muy cercano a la realidad para algunos, pero sin duda vale la pena jugarlo.
Brothers: A Tale of Two Sons (2013)
Seria imposible negar que esta historia de hermandad y sacrificio no nos golpeó en todas nuestras emociones. Para salvar a su padre enfermo, dos hermanos emprenden un viaje en el que enfrentan casi todos los peligros que uno puede esperar en un mundo de fantasía. Con cada rompecabezas resuelto, realmente te encariñas con Naia y Naiee. Por supuesto, las cosas toman un giro trágico tras otro, y el juego no teme concluir con las notas más agridulces.
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